Categoría: Noticias
Fecha de publicación: octubre 21, 2024

Pioneros de los ácaros depredadores: un recorrido por las innovaciones en biocontrol

En el vibrante mundo de la horticultura, Koppert destaca por su compromiso con la innovación. Combinando un profundo respeto por la naturaleza y la comprensión de los retos de los productores, estamos transformando el control biológico de plagas con productos de vanguardia. Hablamos con Peter Couwels, director de operaciones de Koppert, sobre las innovadoras soluciones a base de ácaros depredadores que marcaron un punto de inflexión para la empresa y cómo Koppert se está preparando para futuros retos con nuevas y evolucionadas soluciones.

Peter Couwels se considera a si mismo un activo fijo en Koppert, «parte del mobiliario de la empresa», como él mismo los expresa. Originario de Bélgica, Peter llegó a la sede de Koppert en los Países Bajos en el 2001. «En 1967, nuestro fundador Jan Koppert logró un gran avance al ser el primero en utilizar ácaros depredadores para el control de plagas», dice Peter. «En el 2006, participé en otro momento crucial de nuestra historia cuando lanzamos nuestra solución Swirski-Mite, que cambió las reglas del juego en la protección de cultivos».

La revolución Swirski-Mite

Swirski-Mite llegó en un momento crucial, cuando la preocupación por los residuos químicos en los pimientos cultivados en Almería (España) obligó a cambiar los métodos protección de cultivos de convencionales a biológicos. «Los productores necesitaban urgentemente una solución para una especie de trips difícil de controlar», explica Peter. «Fuimos pioneros en el uso del ácaro depredador Amblyseius swirskii , desarrollamos tecnologías innovadoras de envasado y liberación e invertimos en instalaciones para la producción en masa, lo que dio como resultado una solución eficaz y viable. Esos avances, a su vez, han servido de plataforma de lanzamiento para nuevas soluciones, como nuestros ácaros depredadores Neoseiulus californicus, Transeius montdorensis y Amblydromalus limonicus, y tecnologías de liberación como el Airobug».

Superando barreras

El Airobug es uno de los sistemas de soplado de aire de Koppert para la distribución eficaz y uniforme de enemigos naturales. «Al introducir diferentes tipos de sistemas de liberación, hemos eliminado una importante barrera para que los productores, especialmente de cultivos ornamentales, adopten herramientas de biocontrol», explica Peter. «El sistema Airobug se acopla a monorrieles o rieles tubulares, moviéndose automáticamente de un lado a otro para liberar la dosis adecuada de enemigos naturales, lo que se traduce en un control biológico de plagas eficaz, ya que los ácaros pueden llegar más rápidamente a la plaga».

Una caja de herramientas para la innovación

Desde el 2006, Koppert ha acelerado la introducción de nuevas soluciones. «La globalización y el cambio climático crean las condiciones ideales para que las especies invasoras surjan y se propaguen rápidamente», afirma Peter. «Consideramos que es nuestra responsabilidad encontrar soluciones a esos retos lo antes posible para ayudar a prevenir y limitar los daños y las pérdidas en los cultivos. Para lograrlo, hemos desarrollado el rango de ácaros depredadores más amplio e innovador del mercado, con numerosas especies y formulaciones adaptadas a las distintas condiciones de crecimiento. Cuando la rapidez es esencial, confiamos en este conjunto de soluciones. Al elegir la combinación adecuada, podemos responder mucho más rápidamente que si tuviéramos que buscar un nuevo enemigo natural para cada nuevo reto. Esa rapidez hace la diferencia entre una temporada de cultivo exitosa y otra desastrosa».

Cuando el trips parvispinus apareció en España, causando estragos en hortalizas y plantas ornamentales, Koppert recurrió a su sobre Ulti-Mite para dar una respuesta rápida. «Fuimos los primeros y seguimos siendo la única empresa que ofrece una alternativa a los sobres de papel para la aplicación de ácaros depredadores en climas difíciles. Inicialmente desarrollamos nuestros sobres Ulti-Mite, fabricados con láminas compostables industrialmente que pueden soportar el calor y la baja humedad. Hemos aplicado esta misma tecnología para adaptar nuestra Transeius montdorensis a las condiciones de crecimiento en España, creando Montdo Ulti-Mite. Gracias a nuestras inversiones en instalaciones de producción de última generación y a la logística de la cadena de frío, pudimos introducir rápidamente este producto en el mercado y hoy, es un componente clave en los programas de control biológico, en el que múltiples depredadores trabajan juntos para controlar esta plaga resistente a los productos químicos».

Mantenerse a la vanguardia

Koppert se dedica a hacer un seguimiento de las plagas nuevas y existentes, incluida su propagación y la evolución de su comportamiento en nuevas plantas, cultivos, regiones y climas. Aunque es imposible predecir todos los escenarios, la empresa trabaja incansablemente para adelantarse a los retos emergentes. «Tenemos varias plagas en nuestro radar», dice Peter. «Definimos los rangos de plagas, más que las especies concretas, que esperamos encontrar, y empezamos a desarrollar soluciones que abarcan, por supuesto, nuestros enemigos naturales, pero también tecnologías y sistemas que pueden adaptarse fácilmente a especies concretas. El objetivo es estar preparados cuando surja un problema de plagas».

Entre otras plagas, Koppert se centra actualmente en la chinche apestosa. «Anticipamos que esta plaga se convertiría en un problema mundial», dice Peter. «Para prepararnos, desarrollamos un parasitoide, Trissolcus basalis, contra la chinche apestosa Nezara viridula. También invertimos en tecnología para adaptar nuestra solución a distintas especies de chinches apestosas y creamos instalaciones para la producción masiva. No importa dónde ni cuándo aparezcan, estamos preparados para hacerles frente».

De local a local

La presencia mundial de Koppert beneficia a los productores, pero también plantea retos de sostenibilidad. Al descentralizar su producción, Koppert ha reducido las emisiones relacionadas con el transporte y también ha acercado la empresa a sus clientes. Peter: «En 2021, abrimos una planta de ácaros depredadores en Howell, Michigan, cerca de Detroit. Esta ubicación nos permite servir a los productores de todo Estados Unidos y Canadá de manera más eficiente. Ahora estamos más cerca que nunca de los clientes de la región del Niágara, lo que nos permite responder más rápidamente a las necesidades locales. Este enfoque de proximidad no sólo es sostenible, sino que mejora significativamente nuestro servicio».

Pasión y compromiso

Cada día, biólogos, ingenieros y consultores técnicos impulsan la innovación de Koppert. Su éxito se debe no sólo a su experiencia, sino también a su motivación intrínseca. «Una vez que la gente se une a Koppert, a menudo se queda mucho tiempo, a veces incluso toda su carrera», dice Peter. «El nivel de pasión, compromiso y experiencia es notable. Por eso destacamos. Somos capaces de navegar con éxito por una red compleja con innumerables parámetros que interactúan. Además, somos capaces de transferir parte de esa pasión a nuestros socios de la cadena de suministro. El resultado es una máquina bien engrasada que produce innovaciones con un impacto duradero en la comunidad hortícola».