Guillermo Campos, productor de tercera generación de papaya, está liderando un cambio transformador en la agricultura a campo abierto en la región del sur-sureste mexicano. Con cinco años de experiencia en el control biológico, Guillermo y su equipo han demostrado que es posible obtener mejores resultados en la producción agrícola al reducir el uso de agroquímicos y priorizar técnicas amigables con el medio ambiente.
De la tradición a la innovación
El camino hacia el control biológico comenzó como una respuesta a los desafíos del manejo convencional de plagas y enfermedades. En palabras de Guillermo, «ya no veíamos el camino con el manejo convencional». Aunque al principio había dudas sobre la eficacia de estas herramientas, la perseverancia y la experimentación dieron frutos. Hoy, Biocamp, empresa familiar dedicada a la asesoría en control biológico, ha ampliado su alcance a cultivos como hortalizas, flores y cítricos.
Con el control biológico, Biocamp ha logrado un incremento de hasta un 40% en la producción de papaya, acompañado de mejoras significativas en la calidad del producto. Los consumidores prefieren las papayas con control biológico por su dulzura y sabor, una ventaja que también se traduce en sostenibilidad ambiental y mayor rentabilidad para los agricultores.
Retos y aprendizajes
Uno de los principales desafíos iniciales fue superar el miedo a lo desconocido, tanto a nivel personal como entre los productores que asesoraban. La transición hacia prácticas más sostenibles requiere un cambio de mentalidad. «El reto más grande que yo veo en la agricultura es cambiar la mentalidad en los agricultores», señala Guillermo.
Un trabajo colaborativo
Biocamp ha trabajado estrechamente con Koppert perfeccionando la logística y garantizando la eficacia de los productos utilizados, como hongos entomopatógenos, ácaros depredadores y otros enemigos naturales, así como trampas para el monitoreo y trampeo. Guillermo destaca el profesionalismo y la humanidad del equipo de Koppert, cualidades que han hecho de esta alianza un pilar para el éxito de Biocamp.
Guillermo visualiza un crecimiento continuo para el control biológico en la región. Con más agricultores sumándose al movimiento, Biocamp, de la mano de Koppert, está posicionada para liderar este cambio hacia una agricultura más saludable y sostenible. «Los buenos resultados se anuncian, se corre la voz», afirma, convencido de que este es solo el comienzo de una transformación agrícola.
Biocamp es un orgulloso distribuidor de Koppert.