Hay muchos robles en los bosques y plantaciones de los alrededores de Doetinchem. Marc van Rijswijk es el portavoz de Buha, la organización ejecutora del municipio de Doetinchem entre cuyas responsabilidades está la gestión ecológica. Buha gestiona unos 9000 robles solitarios dentro de este municipio. En 2020, el nivel de infestación por la oruga procesionaria del roble dentro de la zona urbanizada era tan alto que se hizo necesaria una gestión preventiva. Creemos que es importante mantener la biodiversidad en el centro, y la opinión pública es bastante sensible a la pulverización aquí. Consultamos al distribuidor Mertens y decidimos que en primavera empezaríamos a utilizar Entonem, el producto de Koppert contra los nematodos. Una gran ventaja es que la captura accidental de otras orugas es mucho menor, lo que supone un gran beneficio para la biodiversidad. A mediados de abril empezamos a utilizar nematodos en lugares con grandes posibilidades de contacto dentro de la zona urbanizada. Para conseguir un efecto óptimo, lo hicimos dos veces".
Entonem, un eslabón importante
Van Rijswijk confía en que el uso de nematodos ayude a reducir el nivel de infestación. Utilizando Entonem y extrayendo los nidos como medida curativa, podemos mantener la situación controlable por ahora. A más largo plazo, la mejora de la biodiversidad desempeñará un papel importante, ya que abrirá brechas en los monocultivos de la oruga y estimulará a los enemigos naturales de la oruga procesionaria del roble. Como ya se ha dicho, el uso de nematodos es una parte importante de esto. Entonem es sin duda un eslabón importante para garantizar el control de la oruga procesionaria del roble".